Dudas acerca de la legalización de la marihuana

En los últimos días se está hablando bastante sobre la legalización de la marihuana y su repercusión en nuestra sociedad, es evidente que es un tema con bastantes controversias y dudas que aún están por resolver.

Canadá se va a convertir en octubre en el primer país del G20 que va a legalizar la marihuana con fines recreativos. Tras esta medida algunos políticos de nuestro país se han hecho eco de ella y la han comentado, así por ejemplos Jorge Moruno, miembro de podemos ha tuitado en su cuenta sobre el potencial que podría tener España en la producción de marihuana. “Tiene un clima privilegiado que bien podría exportar marihuana con denominación de origen a Canadá; pero nada, será una locura…” Tras este comentarios, el líder de podemos también se ha sumado a la propuesta de la legalización de la marihuana.

En un Tuit, Pablo Iglesias viene a decir que la producción de cannabis en España generaría suficientes ingresos al Estado para poder tener la mejor sanidad pública del mundo.  La regularización del cannabis, ya sea medicinal, recreativo o ambos, es algo que desde algunos partidos políticos se lleva planteando en España desde hace algún tiempo. A esta propuesta se suman diversas plataformas de consumidores de España.

De este modo, se plantean diversas preguntas acerca de cómo sería su legalización, qué es el uso medicinal o como se está realizando esto en otros países.

En este post vamos a intentar aportar un poco de claridad sobre las preguntas que surgen a la hora de hablar sobre la legalización de la marihuana.

¿En qué situación legal se encuentra ahora mismo la marihuana en España?

Actualmente en España no se puede cultivar, consumir ni vender marihuana legalmente, salvo en pocas excepciones. En la ley sobre estupefacientes se dice que su consumo es ilegal, tanto en el ámbito público como en el privado, si no está prescrito por un médico. Aún así, su consumo y posesión no conllevan sanción a no ser que se realice en la vía pública, en este caso sería sancionado por la ley de Protección de la Seguridad Ciudadana, conocida como ley Mordaza.

Esta misma ley Mordaza sanciona el cultivo para autoconsumo si la plantación está en espacio público o es visible desde el espacio público, con independencia del número de plantas. El cultivo para uso propio en un espacio privado, tampoco es legal, pero no está penalizado. Sí que está penalizado, con 1 a 6 años de cárcel, dependiendo del tamaño de la plantación, el cultivo dedicado a la venta y trafico.

Actualmente en España no se puede cultivar, consumir ni vender marihuana legalmente, salvo en pocas excepciones.

Y la marihuana medicinal, ¿En qué situación se encuentra?

En España se permite el consumo de marihuana para uso medicinal, lo cual no significa, que se puedan fumar marihuana con fines medicinales. La marihuana, como tal, no se considera un medicamento y no se receta, pero sí algunos productos derivados del cannabis. Según José Martínez Orgado, médico y miembro de la Sociedad Española de Investigación Sobre Cannabinoides “Las sustancias químicas que producen los efectos de la marihuana, los cannabinoides, se pueden extraer para hacer medicamentos e incluso se pueden producir de modo sintético”.

Estos cannabinoides se pueden usar para aliviar los dolores y los efectos de enfermedades relacionadas con tratamientos para tumores, daños cerebrales, rigidez muscular o epilepsia. En estos momentos, en España, tan solo existe un medicamento basado en los cannabinoides, Sativex, que se usa para disminuir la rigidez muscular en los enfermos con esclerosis.

En España se puede cultivar marihuana terapéutica, pero para su consumo en países donde la planta sí se receta como medicamentos, como en Canadá. Para ello se necesita una autorización de la Agencia Española del Medicamento y para obtenerla hay que tener in contrato con una empresa extranjera autorizada en el que se exponga la cantidad de cannabis que necesitan y que será el límite que se puede cultivar.

¿Cómo se regula el cannabis en los países en los que es legal?

No todos los países que han regulado y  legalizado el uso del cannabis lo han hecho del mismo modo, estos serían los modelos más comunes:

• Para uso medicinal: Es el modelo elegido por Israel o algunos estados de Estados Unidos, aquí es legal el cultivo de marihuana con la consiguiente licencia del gobierno, así como su venta, bajo prescripción médicas, en puntos de venta especializados.
• Para uso medicinal y recreativo: Es el caso de Uruguay y lo será en Canadá en octubre. Su funcionamiento es muy parecido al del tabaco en España. Está prohibida su venta a menores, solo se comercializa en establecimientos autorizados con licencia y en Uruguay está restringido a 40 gramos por persona y mes. Su cultivo se debe realizar bajo autorización del gobierno.
• Lugares determinados para su compra y consumo: este es el caso de los Países Bajos, aquí está permitida la compra y venta, a mayores de edad, en sitios especializados “ coffe shops” y con un límite de compra de 5 gramos por persona, pero su cultivo es ilegal.

¿Se considera la marihuana una droga blanda?

El consumo de cannabis puede producir esquizofrenia, brotes psicóticos, problemas de memoria, de concentración o disminución de la motivación entre otros muchos efectos, pero la categoría de droga blanda o dura no está relacionada con los efectos que produzca, si no con las penas que se aplican en su producción.

Desde varios colectivos se insiste en que es perjudicial tratar a la marihuana como droga blanda, pues puede hacer que la visión del riesgo que representa su consumo se vea disminuido y por tanto aumente su consumo e incluso se corre el riesgo de que disminuya la edad de inicio de éste.

¿Qué argumentos hay contra su regulación?

• Nos encontraríamos con los mismos problemas del alcohol y tabaco, que son las drogas, regularizadas, que primero consumen los jóvenes españoles.
• Problemas de adicción: Se trata de la segunda droga con más admisiones para tratar su desintoxicación, casi igualada con la cocaína. Aunque según algunos expertos no causa dependencia física, si que causa dependencia psicológica, engancha su efecto de paz, de euforia.
• Su percepción de sustancia peligrosa disminuiría de forma considerable, acarreando la menor percepción de los riesgos que conlleva su consumo.

¿Qué argumentos hay a favor de su regulación?

• Si fuese legal se podrían garantizar unos controles de calidad que afectaría positivamente en la salud de los consumidores.
• El estado podría obtener importantes ingresos gravándola con los impuestos especiales con los que se gravan este tipo de sustancias.
• En España, aún siendo una droga ilegal es una de las drogas más usadas, por tanto su prohibición no hace que su consumo sea menor.

¿Su legalización es la forma de acabar con el narcotráfico?

Es un argumento que no queda demasiado  claro, aunque el tráfico nace de la prohibición, la legalización no garantiza que se acabe con él. En España el tabaco es legal y sin embargo existe su tráfico ilegal.

 La regularización del cannabis, ya sea medicinal, recreativo o ambos, es algo que desde algunos partidos políticos se lleva planteando en España desde hace algún tiempo.